Este 19 de septiembre, Jojutla realizó una ceremonia cívica en memoria del día de luto nacional, evocando las consecuencias de los sismos que azotaron a México en 1985 y 2017.
Fue entregada la presea Puño y Fuerza a ciudadanos, empresarios y agrupaciones que ayudaron a los damnificados del sismo del 19 de septiembre de 2017.
El General de Brigada Antonio Ramírez Escobedo, titular de la 24a Zona Militar, recordó cómo se da la cooperación entre los tres niveles de gobierno, desarrollando actividades en apoyo a la sociedad civil en caso de desastres naturales.
Recordó que en 1965 se elaboró e incluyó en la planeación estratégica militar el Plan de Auxilio a la población civil DNIII-E, un plan estratégico militar que establece los lineamientos generales a los organismos del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana para auxiliar a la población afectada por los desastres de origen natural o humano, utilizando todos los recursos humanos y materiales para su atención oportuna y eficaz apoyando además en la preservación de sus bienes y en su entorno pero requiere además de la participación de todas las organismos de administración pública general, de la administración pública y social.
En su intervención, el presidente municipal, Juan Ángel Flores Bustamante recordó que en Jojutla no pasaba nada desde 1848, cuando hubo un gran temblor y surge precisamente el lago de Tequesquitengo; "ese 19 de septiembre de 2017 decidimos hacer el simulacro que finalmente se hace año con año, jamás pensamos en nuestra historia que unas horas después un terremoto iba a destruir".
“En cuestión de segundos se vinieron abajo 2 mil 900 viviendas con pérdida total, 14 mil con daños parciales, era un momento de locura que Jojutla registra en su historia con mucho dolor, pero también es a partir de ese momento nos dimos cuenta lo fuerte que somos”, dijo, al reconocer que no fue fácil, sobre todo para las personas que perdieron a sus seres queridos.
La ceremonia y entrega formal de la presea Puño y Fuerza 2023 resalta la valentía y la entrega desinteresada de quienes se destacaron por su compromiso inquebrantable con la comunidad en medio de la adversidad.
Juan Ángel Flores Bustamante dijo que la entrega de esta presea es un testimonio conmovedor de la resiliencia y la unidad que caracterizan a esta ciudad, y busca inspirar a todos a seguir trabajando juntos para construir un futuro más fuerte y solidario.
La presea fue entregada a la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) y la recibió el rector Gustavo Urquiza Beltrán; la Fundación Mañanitas para Todos A.C., y la recibieron Pablo y Francisco Bernot; Carlos Iturbe Rivera recibió en representación de la Asociación tierra fraterna A. C. y de la familia Iturbe Batschin.
Andrés Montemayor Sedano, por el Club Rotary Internacional, Coordinador del distrito 41/85, que brindaron ayuda humanitaria al pueblo de Jojutla. El ingeniero Hernán Isaí Gómez Arce, uno de los primeros que hizo, a través de drones, la geolocalización de los comercios que se cayeron durante el sismo, la cual entregó al gobierno estatal y federal. Coordinó el centro de acopio del tecnológico de Zacatepec; creando una red de amigos que tenían centros de acopio y facilitando información para brindar una ayuda más organizada.
Fernando Fernández Pérez, empresario de Jojutla que instaló uno de los más importantes centros de acopio que entregó colchones y alimentos en todo el municipio. Alejandra Bibiana Oliveros Flores, productora y directora de la plataforma “El color de la mujeres, radio y podcast”, durante el sismo de 2017, convocó a la recaudación de más de 30 toneladas de víveres que llegaron de diferentes estados como Sinaloa, Jalisco y Sonora, y consiguió apoyo de los empresarios de Morelos con víveres y herramientas que llegaron a manos de los damnificados.
Arleth Michell Hernández Loeza, maestra de primaria en el estado de México, durante el sismo fue estudiante de la Universidad Pedagógica Nacional, sede Atizapán de Zaragoza, Estado de México, movilizó a su comunidad académica en una campaña de ayuda comunitaria en nuestro municipio del que es originaria. Logró recolectar una amplia variedad de apoyos como despensas, plantas, ropa, víveres entre otros, sin duda un ejemplo inspirador de solidaridad.
Ivan Hernández Vargas, maestro del CBTA número 2 del Estado de México, entrego apoyo en las comunidades que sufrieron daño, organizo colecta de víveres, ropa y entregó de manera directa a los damnificados.
Edith Viridiana Flores Flores, secretaria ejecutiva del Sistema de protección Integral a Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Baja California, apoyó con brigadas médicas e instalación de centros de acopio. A través de las redes sociales convocó a la comunidad tijuanense a unirse a la noble causa de ayudar a los damnificados por el sismo, logrando reunir víveres, artículos de limpieza, medicamentos entre otros, haciendo honor a los valores y el sentido humanista que la caracteriza.
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