El sacerdote Rosalino Arias Gomez, de la colonia Carolina, recorre las calles del lugar para bendecir los ramos de los vecinos que salen de sus hogares para participar del Domingo de Ramos.
En el recorrido el padre lleva consigo la imagen de Cristo Rey.
A diferencia de otros años, éste los sacerdotes saldrán a las calles a bendecir los ramos de los feligreses para que los morelenses puedan “quedarse en casa”.
Así como el señor Jesús entró triunfante a Jerusalen así también nuestra iglesia guiada por nuestro señor Jesucristo, pricipalmente en nuestra Dióecesis y por nuestro Obispo Ramón Castro, celebra en toda nuestra Diócesis el Domingo de Ramos.
Comenta que tuvieron que acercarse a los feligreses “hoy la gente no puede ir a las iglesias nosotros salimos a sus casas a bendecirles sus ramos, sus palmas y sus vidas”, mientras remoja el ramo para rociar a las personas que se acercan a él.
Con un “Viva Cristo Rey” algunos vecinos caminan a la par de la camioneta del párroco acompañando cuadras arriba de la colonia Carolina; otros aportan su limosca con el jóven que se acerca con una caja de cartón para recibirla.
Escasos los ramos en este Domingo, afuera de la Parroquia de Nuestra Señora de San Juan de Los Lagos comerciantes venden las figuras de palmas con un costo entre 10 y los 20 pesos dependiendo la figura.
Tal como las terminan la gente ya está en espera de comprarla.
Tengo desde diez pesos, quince pesos, y los más caros 25 pesos, depende de la forma y el tamaño, cuenta el comerciante apurado para entregar el mayor número de ramos que pueda.
En pocas horas los comerciantes agotarán su vendimia ya que fueron los únicos que decidieron salir para vender, distinto al año pasado en que la oferta era basta.