Los muertos peregrinan en Coatetelco; no hay espacio en panteones

En el municipio indígena de Coatetelco reconocen que son comunes las exhumaciones y reinhumaciones de restos humanos de las tumbas

Angelina Albarrán | El Sol de Cuernavaca

  · miércoles 30 de noviembre de 2022

En el panteón de Coatetelco hay lotes diseñados para poder enterrar hasta tres cuerpos. / Angelina Albarrán | El Sol de Cuernavaca

En el municipio indígena de Coatetelco, ante la falta de espacio en el cementerio de la localidad, se ha vuelto una práctica común la exhumación y reinhumaciones de restos humanos que llevan más de 10 años enterrados; sin embargo, estos movimientos siempre se hacen con permiso de las autoridades municipales y con el de las familias de los deudos.

"Para que el panteonero realice estos trabajos, los deudos deben presentar los permisos, como la orden de reinhumación, pago de derechos del espacio en el camposanto y el acta de defunción", informó el encargado del panteón San Juan y su ampliación, Marcelino Octaviano Martínez.

Quien además, aceptó que para él este tipo de prácticas ya le parecen normales, pues desde hace varias generaciones se llevan a cabo la exhumación y reinhumación de restos humanos.

Esto siempre y cuando exista una petición por parte de los deudos, quienes muchas veces hacen este tipo de solicitudes por falta de espacio o porque simplemente quieren enterrar a sus familiares en el mismo panteón.

Octaviano Martínez reconoció que, esta petición es cada vez más frecuente, y no tanto por querer enterrar a sus muertos en un mismo lugar, sino porque ya no hay más lotes ni espacios en el panteón, a pesar de que ya han hecho una ampliación en el camposanto.

Un ejemplo de esto es un lote que está diseñado para tres tumbas, el cual será abierto después de 10 años para sacar el ataúd, durante ese proceso, los panteoneros depositan en un costal o bolsa de manta los restos de la persona, prendiendo una veladora mientras se lleva a cabo un nuevo entierro en el mismo sepulcro, al finalizar se dejan los restos humanos de la otra persona junto al nuevo ataúd.

Por estas acciones es que, en el panteón de Coatetelco se pueden observar tumbas con hasta tres cruces.

Por otro lado, Daniel Ponce, auxiliar forense indicó que, estos trabajos solo los deben realizar personas capacitadas o trabajadores de funerarias, pues si no se toman las medidas de prevención, se puede contraer una enfermedad por algún tipo de hongo producido por el cadáver de la tumba.



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