A través de la asociación civil San Vicente de Paul, los juguetes enviados por los reyes magos llegaron a los pequeños que habitan en Loma Esmeralda, Jiutepec.
Gladys Herra Torral, presidenta nacional de la asociación San Vicente de Paul, contó que está es una labor que hacen desde hace más de 40 años con el objetivo de no desamparar a las infancias.
"Llevamos pan y roscas, juguetes y hacemos actividades con los niños para que la pasen bien ese día".
Detalló que los voluntarios y coordinadores de esta jornada son jóvenes que van desde los 16 hasta los 35 años, y la recaudación de los juguetes nuevos o en buen estado que no requieren baterías, se comenzaron a recibir desde la última quincena del mes de diciembre y los primeros días de enero del 2023.
En diciembre, recordó, organizaron una posada en esa misma comunidad, a la que asistieron diversas familias para participar en la convivencia, en la cual quebraron piñatas, compartieron ponche y dulces.
Gladys Herra agradeció que, a pesar de la situación económica que se vive actualmente, la población y algunas empresas sigan apoyando a los sectores más vulnerables de la sociedad.
Refirió que los juguetes fueron entregados por diversas personas que se convirtieron en ayudantes de los reyes magos para regalar felicidad a cada uno de los menores, además de que también una panadería de Civac les hizo la donación de roscas, y con ello pudieron llevar alegría esa comunidad en donde la gente vive en condición de pobreza.
Destacó que sólo través de las redes de apoyo se puede fortalecer a la sociedad en su conjunto.
Explicó que para la asociación es importante llevar a cabo este tipo de actividades, ya que, en la mayoría de los casos, los menores de esa comunidad no tienen la posibilidad de salir a pasear o divertirse con su familia, y al igual que los voluntarios, los asistentes disfrutan de cada momento que viven.