Pablo Rubén Villalobos, presidente del Consejo Cívico Ciudadano, señaló que las irregularidades que existen en el Paso Exprés se deben a que las decisiones fueron unilaterales por parte del entonces secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), Gerardo Ruiz Esparza; además de que la empresa constructora fue la que eligió el gobierno de la República. Destacó que, pese a que la obra se realizó de forma errónea, la empresa ganó concesiones de otras carreteras y espacio dentro de la obra del nuevo aeropuerto en la Ciudad de México.
De acuerdo con el Consejo Cívico Ciudadano durante la construcción del Paso Exprés se contabilizaron 36 muertes; el caso más sonado fue el de la familia Mena, mientras que otras 34 personas resultaron severamente afectadas porque sus viviendas quedaron en los voladeros.
Hay gente que resultó damnificada y no le han pagado los daños, pese a los ofrecimientos de convenios que no se han cumplido, todo eso lo tienen documentado los vecinos de la colonia Acapatzingo, Las Águilas, la colonia Antonio Barona y otros rumbos dentro de los 14.5 kilómetros que tiene la carretera en sus dos sentidos, que son en total 27 kilómetros.
A pesar de que el costo del libramiento fue calculado en principio en mil 200 millones de pesos, en el transcurso de dos años que duró la construcción se disparó a 2 mil 200 millones de pesos, y hasta el momento no se ha informado la cantidad exacta que se ha gastado en el tramo de Chipitlán ,donde apareció el socavón y demás irregularidades que están surgiendo como consecuencia de las aguas subterráneas de la barranca de Santo Cristo, la pluviales que siguen socavando el pavimento en área de Chipitlán al Polvorín.
Anunció que el jueves tendrá una reunión los representantes del Consejo Cívico Ciudadano en Colectivo con Armando Haddad, presidente del Consejo de Hombres de Negocios de Morelos, fundador y presidente de la Asociación Civil Morelos Único y Morelos Seguro Contigo, y el diputado Alejandro Mojica, para elevar el reclamo por petición y propuesta uno de los puntos neurálgicos del país por obras mal hechas o por obras que necesiten con urgencia la mano del gobierno federal, como es el libramiento de Cuernavaca.