El presidente de la Asociación de laMasa y laTortilla del estado de Morelos, Antonio Vázquez Quezada, aseveró que la marca "Maseca" sí utiliza aditivos no totalmente aptos para el consumo humano, por lo cual en el estado varias tortillerías que manejaban harina han cerrado o dejaron de consumirla ante el miedo de poder perjudicar la salud de sus clientes, además de que la calidad en los productos no es la misma a cuando procesan el maíz nixtamalizado.
Expresó que quienes procesan la tortilla normalmente siempre lo hacen con agua, cal y maíz, mientras esta marca mexicana mete otro tipo de productos que podrían estar pasados de tiempo y podría ocasionar problemas en la salud de los usuarios, siendo los responsables el procesador final.
Vázquez Quezada recordó que hace seis años dejaron de funcionar unas tortillerías llamadas "La Casa del Maíz" que procesaban 100 por ciento harina de Maseca, las cuales obtuvieron el desagrado de la población al no contar con una buena calidad como las de puro maíz.
Confirmó que en la entidad no se presentó ningún caso de alguna persona afectada, sin embargo, en entidades como Monterrey y Querétaro al estar completamente harinizados si se han suscitado daños en la salud de sus consumidores teniendo que dejar de utilizar esta marca.
Por su parte, el presidente de El Barzón Morelos, David Padilla Marín, refirió que esta semana los productores de dicha organización campesina se reunirán con representantes de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedagro) y de la Comisión de Desarrollo Agropecuario del Congreso local para abordar el problema del glifosato en los cultivos de maíz de la entidad.
Señaló que en algunas regiones de la entidad ya hay productores utilizando fertilizantes biológicos, por lo que esta sería una vía para erradicar el uso de productos nocivos para la salud:
Lo estamos probando en los municipios de Ocuituco y Tetela del Volcán y está resultando que la flora está muy bien en ese sentido, y ahora es lo que estamos promoviendo con los compañeros para empezar una política de cambio serio con los productores del campo, explicó.