A pesar de que algunos no tienen familia o sus seres queridos ya no pueden cuidarlos, los abuelitos de la Casa Hogar “Las Palomas” en Cuernavaca festejan la navidad rodeados de los trabajadores, quienes son su familia con una comida gracias a donaciones de los ciudadanos, teniendo como objetivo festejarles esta época del año sin importar el estado de salud o la edad que tengan.
Dos días antes de la víspera navideña, empleados de la Casa Hogar preparan un pequeño buffet para los 26 adultos mayores, algo fuera de la rutina y que no prueben diario, como por ejemplo el pavo, así como brindan con sidra y toman cervezas recordando esos viejos momentos y agradeciendo por el amor y paciencia que les tienen en este fundación de ayuda al anciano fundada desde hace aproximadamente 40 a 50 años.
La cena es donada y en algunos casos, la misma directora tiene que comprar ciertos artículos pero no importa, ya que el punto es poder disfrutar este día de gozo donde hablar con los adultos mayores siempre es una experiencia única y llena de aprendizaje, nunca es cansado o tedioso, siempre te generan una alegría al transportarse a ciertos momentos en su vida que los marcaron, tal vez no relacionados a esta época decembrina pero sí una parte importante de su vida para ellas y ellos.