En el panteón municipal de Jojutla, decenas de tumbas lucen en total abandono. Algunas incluso sin reconstruirse a cuatro años del sismo que destruyó una serie de monumentos antiguos. La escena contrasta con aquellas que ayer, Día de Muertos, recibieron flores y la visita de sus seres queridos.
Se trata del panteón “viejo”, donde desde hace años se agotaron los espacios e incluso se tiene que caminar sobre las tumbas para pasar de un extremo a otro.
Desde las 7:30 horas abrieron las puertas del camposanto y comenzó el arribo de las familias que acudieron a depositar ofrendas florales.
Son muchas las tumbas que a cuatro años del sismo del 19S de 2017 siguen seriamente dañadas, resquebrajadas, muchas ya sin las cruces, algunas en total abandono e incluso en condiciones inaccesibles.
En el panteón municipal “Pedro Amaro” hay grandes contrates de tumbas arregladas con las flores de las ofrendas y las que ya no tienen cruz y no reciben flores, lucen abandonadas como el extremo del panteón donde se encuentra la fosa común, donde ni cruz ni flores reciben estos muertos que siguen sin ser identificados.
En el panteón de Tepoztlán, el que se ubica en el barrio de Santo Domingo, la afluencia fue menor pero los pocos que sí asistieron aseguraron que lo hicieron con toda la fe para darle la bienvenida a este mundo a quienes ya se fueron.
“Más que nada es un ritual para recordar a nuestros seres queridos pues que ya se marcharon y es una tradición, una bonita tradición que estamos inculcando a nuestros hijos. Se limpia la tumba, se ponen flores y una veladora”, dijo Alejandra Hernández.
Continuar con la tradición en un pueblo tan místico como Tepoztlán resulta casi una obligación que con mucho gusto cumplieron las familias de este municipio. “Es algo que nos enseñaron nuestros padres y nuestros abuelos y hay que seguir con esta tradición, costumbre, se podría decir, para que no se pierda así como nosotros también debemos enseñarle a nuestros hijos para que esto siga perdurando”, aseveró Josafat Conde.
En el panteón de Jonacatepec desde muy temprana hora las personas llegaron para pasar un momento con sus seres amados que “en el camino se adelantaron”. Las familias acudían con flores, veladoras, comida de sus altares, música o mariachi, cerveza y demás.
El gobierno municipal indicó que en estas fechas de día de muertos ingresaron más de tres mil personas, para ello desde días antes se enfocaron en las acciones de limpieza del cementerio.
Desde la entrada el personal del ayuntamiento otorgó gel antibacterial, cubrebocas y realizó la toma de temperatura, como medida de protección ante la pandemia.
Con información de Javier Omaña y Rosaura Hernández