Tras la consulta que se realizó el pasado 20 de febrero, en la que los ciudadanos de Morelos, Puebla y Tlaxcala aprobaron la operación de la planta termoeléctrica de Huexca (municipio de Yecapixtla), el gobierno federal no ha retomado el diálogo con los opositores al Proyecto Integral Morelos (PIM), el megaproyecto energético del que forma parte la planta de ciclo combinado.
Así lo aseguro Juan Carlos Flores Solís, representante legal del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua de Morelos, Puebla y Tlaxcala (FPDTA-MPT), quien recordó que en julio pasado los pobladores de Huexca solicitaron al presidente Andrés Manuel López Obrador visitar la comunidad para tener una audiencia con ellos y conocer los peligros que representaría la operación de la planta energética. Hasta ahora, no ha habido respuesta.
Dijo que iba a dialogar con los afectados, pero nosotros le pedimos hacerlo de manera transparente y pública, y lo que él está buscando es negociar con las autoridades agrarias.
De acuerdo con integrantes del FPDTA-MPT, el gobierno federal sí ha mantenido reuniones con ejidatarios, pero no con los pobladores que viven en la comunidad donde se construyó la obra.
Es una política que sigue siendo extractivista, que ignora a los pueblos originarios, a los pueblos de México, acusó Flores Solís.
A caso siete meses de aquella consulta, la planta de Huexca sigue fuera de funcionamiento, toda vez que el acueducto que la surtiría de agua no ha sido terminado. Ello, en parte, se debe a las acciones de resistencia de varias agrupaciones, pero también a los procedimientos legales que los opositores han iniciado en contra del PIM.