De acuerdo a datos de la UNAM, las patentes otorgadas al IBt de Morelos han sido creadas para combatir distintas problemáticas en la vida diaria de la sociedad, como por ejemplo, la generación de nuevos péptidos variantes de defensinas humanas.
Los péptidos son pequeñas cadenas de aminoácidos, moléculas efectoras de la inmunidad innata, que actúan como primera barrera defensiva frente a las invasiones por microorganismos patógenos.
Los investigadores Gerardo Corzo, Iván Arenas, Ligia Corrales García, Marco Ibarra, Alondra Callejas, Félix Santana, Alexis Rodríguez y Elba Villegas, señalan en el artículo "Péptidos antimicrobianos, una alternativa al uso de antibióticos convencionales" para la revista Biotecnología en Movimiento, que para el año 2050 se estima que la salud de alrededor de 10 millones de personas estará comprometida por infecciones de bacterias multirresistentes a antibióticos, siendo más susceptibles los individuos con un sistema inmunológico comprometido.
Esto será a consecuencia del uso sin control de los antibióticos, al favorecerse la selección y propagación en el ambiente de bacterias resistentes a su acción. Debido a esta problemática, indican, hay una urgente necesidad de identificar nuevas moléculas con actividad antibacteriana que puedan emplearse como alternativa a los antibióticos convencionales.
Los organismos cuentan con mecanismos de defensa que pueden ser divididos en inmunidad innata (se nace con ella) y la inmunidad adaptativa (adquirida mediante una vacuna contra alguna enfermedad); aquí es cuando se presentan los péptidos antimicrobianos como una alternativa al uso de antibióticos convencionales.
Entre 2017 y 2018, los doctores e investigadores desarrollaron la patente mexicana No. MX 352715 B.
Se trata de la generación de nuevos péptidos lineales recombinantes (cadenas cortas de aminoácidos, producidas en bacterias modificadas genéticamente) o sintetizados químicamente, con base en secuencias primarias de una familia de proteínas llamadas defensinas humanas, que son péptidos antibióticos que se encuentran naturalmente en tejidos epiteliales, además de mucosas orales y nasales, pulmón, glándulas salivarías, intestino, estómago, riñones y ojos, entre otros, del ser humano, así como de muchos animales.
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