En temporada de calor aumenta la cantidad de casos de picaduras de alacrán, en Morelos hay un mayor número de pacientes en los municipios Jojutla y Cuernavaca, según Mauricio Díaz Salgado, coordinador estatal de la Cruz Roja Mexicana.
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“Ya empezamos a tener registros, en la delegación de Jojutla y en la de Cuernavaca. Han llegado personas por sus propios medios al centro hospitalario”, dijo Mauricio Díaz.
Los casos han sido reportados con más frecuencia los fines de semana, debido a que las familias pasan más tiempo en casas de descanso o zonas al aire libre. Hasta el momento, ninguno ha tenido complicaciones de gravedad.
Mauricio hizo hincapié en la importancia de no subestimar una picadura de alacrán y evitar recurrir a remedios caseros, sino acudir directamente a un centro hospitalario para recibir atención profesional.
“No usen remedios de la abuela, por favor lleven a sus pacientes a un centro hospitalario aunque no tenga la necesidad o síntomas graves“.
Explicó que solo el médico determinará si es necesario aplicar el antídoto. Los pacientes forzosamente tienen que estar en observación, para monitorear cualquier reacción alérgica.
¡No mates alacranes!
La doctora Jimena Isaías Cid, investigadora del Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (IBT), llamó a conservar a los alacranes en el ecosistema. Aunque algunos pueden representar un riesgo para los seres humanos, muchos juegan un papel crucial en el control de poblaciones de insectos. Por lo tanto, sugirió considerar la reubicación en lugar de matar a estos arácnidos siempre que sea posible.
“En este país tenemos alrededor de 280 especies pero no todas son peligrosas para los humanos, alrededor de 20 de ellas nos pueden causar una intoxicación”.
Jimena señaló que todos los alacranes son venenosos, pero no todos causan una intoxicación a los seres humanos o mamíferos, el resto dañan a los insectos únicamente.