Con una caravana por la paz, familiares, amigos y vecinos de los 10 jóvenes acribillados y 14 heridos el pasado 1 de septiembre, en un velorio de la colonia Antonio Barona en Cuernavaca, exigieron justicia y apoyo de una vez por todas de las autoridades estatales.
La caravana partió alrededor de las 18:30 horas de la parroquia del Rosario de dicha colonia hasta llegar a la primera glorieta conocida como "la del oasis", donde instalaron una magna ofrenda en honor de los jóvenes abatidos.
Daniel Jiménez Figueroa, padre de Daniel Jiménez López, de 16 años de edad, acusó que el Gobierno estatal ha sido omiso a casi dos meses del multihomicidio.
Al grito de "justicia", portando veladoras y pancartas con la fotografía de los jóvenes, la caravana integrada por carrozas funerarias y carros alegóricos decorados con temática del día de muertos y hasta pobladores disfrazados de catrinas, brujas y calabazas, recorrió las calles de la referida colonia.
En un primer punto los manifestantes pararon al exterior de la vivienda en calle Lázaro Cárdenas, donde el comando armado cambió la historia de la colonia.
Al son de la "Llorona" y en todo momento los pobladores dijeron basta a la inseguridad, violencia e impunidad que siguen azotando a Morelos, hasta llegar a la primera glorieta de la Barona, donde los estaba esperando una ofrenda, donde gritaron los nombres de los 10 jóvenes abatidos: Dieguito, Óscar, Shere, Víctor, Rubrián, Lalo, Arturo, Pollito, Dany y Alex Cova.
"Exijamos por la paz y la justicia; queremos tener la libertad de volver a salir sin el miedo y temor de que algo vaya a pasar", expresó Daniel Jiménez Figueroa pidiendo un minuto de aplausos por los jóvenes.
La ofrenda que ocupó todo el espacio de la glorieta estuvo adornada con pétalos de la flor de cempasúchil, su comida y bebida favorita, hasta con pequeños féretros que representaron a los 10 jóvenes con la leyenda de "justicia".
La caravana por la paz y la justicia, primera en su tipo en Morelos, estuvo acompañado por Alejandra Flores Espinoza y José Casas González, diputados locales; Daniel Martínez Terrazas, legislador federal y Yareli Jaimes García, encargada de despacho del SAPAC, quienes se unieron a su dolor.
Rodeados por cientos de habitantes de la colonia, concluyeron este importante momento demostrando su amor y recibieron a sus fieles difuntos este 28 de octubre, que es conocido comúnmente como el día en que se reciben a los que murieron a causa de un accidente o de forma repentina y violenta..