La mañana del viernes 22 de febrero inició una marcha de pobladores de Huexca, quienes están en contra de la Termoeléctrica; además exigen justicia para el activista asesinado Samir Flores.
La marcha inició en la cancha de usos múltiples de la comunidad de Huexca, Yecapixtla. Posteriormente hizo una parada en la Termoeléctrica donde jóvenes hicieron un pronunciamiento sobre el uso de la planta.
Asistieron no más de 50 personas debido a que el temor está presente después de la muerte del activista; sin embargo, quienes participaron no dejaron en ningún momento de gritar consignas en contra del gobierno federal y del presidente, Andrés Manuel López Obrador.
Las comunidades estamos muy indignadas por lo que está sucediendo, no se vale que el gobierno en lugar de escuchar sea un represor (...), dicen que nosotros los pueblos no somos los que estamos en lucha, que somos gente pagada de izquierda, pero le decimos que aquí estamos los pueblos, que nos vea, somos el pueblo y no lo que él dice, que somos los conservadores
Teresa Castellanos, vocera de la comunidad de Huexca, reprochó que el presidente con sus palabras lo único que hizo fue que a Samir lo hayan asesinado, "no se vale que nuestra lucha, que ha sido legítima, nos la condenen. Los pueblos estamos gritando porque no somos escuchados por este gobierno, pero ahora, le gritamos que pare su pinche consulta (sic)".
Al unísono de "agua sí termo no" y "Samir no murió, el gobierno lo mató", los manifestantes se trasladaron al Zócalo de Cuautla, donde refrendaron su rechazo a la consulta y a la termoeléctrica, así como exigieron a las autoridades el esclarecimiento del asesinato.