Por el marco del Día Nacional contra la Discriminación, que se conmemora el 19 de octubre la Red Afro de Mujeres AfroMorelenses (RedAfroMAM) realizó un evento cultural con charla, poesía y una dinámica especial con la Danza del Toro de petate, tradicional de la región de la costa de Guerrero y Oaxaca.
El evento fue impulsado por la escultora Flor Molina y la maestra Ana Guadalupe García González, integrantes de la RedAfroMAM, quienes convocaron a mujeres y hombres de diversas edades a esta convivencia para reflexionar en torno al tema de la discriminación racial y desde otros sentidos.
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La maestra Fabiola Meléndez Guadarrama brindó una charla para dar un panorama sobre la discriminación en Morelos, abordando el tema de la afroviolencia y la diversidad étnica, y destacó que Cuernavaca es el municipio donde más población afrodescendiente hay y con más complejidades para formar comunidad.
Señaló también que, en la historia, estas situaciones de discriminación, han marcado una vulnerabilidad que hoy se traduce en una profunda desigualdad estructural que tiene que ver con temas como el acceso a la educación.
Yordanis Febles, poeta decolonial y anfitrión del proyecto Ennegrecer, compartió una serie de poemas de viva voz, con una interpretación con toques de teatralidad, llegando al corazón de los presentes, debido a los diversos temas que toca, y que hacen referencia a la discriminación.
Por su parte, el licenciado Isidro Añorve, reconocido activista de la comunidad LGBT+ y de la comunidad afrodescendiente en Morelos, realizó una explicación de la construcción del Toro de petate.
Isidro Añorve compartió que, debido al blanqueamiento social, el racismo y la discriminación, por muchos años negó su descendencia afromexicana y el lugar donde nació, sin embargo, gracias al activismo que comenzó a abrir su panorama y comenzó a desempeñarse como activista por la comunidad afro.
Cabe destacar que la Danza del Toro de Petate es un símbolo de la identidad afromexicana porque representa una de las expresiones culturales más arraigadas de las comunidades afrodescendientes en la costa de Guerrero y Oaxaca, donde existe una fuerte presencia de la herencia africana. Esta danza, a través de su música, movimientos y simbolismo, conserva y celebra las tradiciones, creencias y vivencias de estas comunidades que han sido históricamente marginadas.
“La Danza del Toro de Petate está presente en todo Latinoamérica, y la gran característica que tiene es que donde se hace la danza, fueron comunidades donde habitaron personas negras en calidad de esclavos. Gracias a la colonización de los españoles empezaron a utilizar estos rituales, y la religión católica lo sincretiza, como muchas de nuestras tradiciones y se lo atribuye, especialmente en la costa chica y en Cuajinicuilapa, a San Nicolás de Tolentino, pero en realidad era un ritual en burla hacia este santo, porque era la manera que tenían los esclavos negros de profanar esa religión que les impusieron, y se fue distorsionando y fusionando en esta perspectiva de la interculturalidad y se vuelve una danza”, comentó Isidro Añorve.
Posteriormente, se realizó una representación de la Danza del Toro de Petate, como símbolo de resistencia. Y la maestra Ana Guadalupe García González, realizó una dinámica sobre un taller del toro de petate, donde algunos de los presentes, compartieron parte de sus vivencias referentes a la discriminación, entregando una flor al toro.
La escultora Flor Molina presentó también una escultura de gran formato, en referencia a El Toro de San Nicolás, que realizó especialmente para este evento, y para llevarlo a la comunidad de San Nicolás Cuajinicuilapa en Guerrero.