El próximo 10 de octubre llegará la reliquia de San Juan Pablo II a la parroquia de San José, ubicada en Parres, Jiutepec. Ese día el obispo Ramón Castro Castro oficiará una misa a las 17:00 horas para realizar la entronización de la reliquia.
El presbítero Tomasz Chlebowski, encargado de la parroquia San José, destacó que se recibe la reliquia en primer grado que corresponde a la sangre de San Juan Pablo II, y el principal objetivo de que lleguen ahí las reliquias es de realizar una oración por la intercesión de Juan Pablo II por la paz en Morelos y despertar la esperanza en los corazones de las personas perjudicadas por la violencia.
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“La llegada de las reliquias son para hacer una oración por la paz que nos falta en Morelos. Cuando yo llegué a esta parroquia, hace año y medio, encontré una situación muy lamentable porque aquí llega mucha gente con las heridas de violencia; los niños espantados de balaceras, los hombres que ya perdieron a sus hijos, algunos que han sido secuestrados, cada familia tiene sus muertos a causa de violencia. Y pensando, ¿cómo podemos luchar?, vino a mi mente Juan Pablo II, quien vivió el tiempo de la Segunda Guerra Mundial y era testigo de mucha violencia y luchaba por el bien y por la paz”, expresó Tomasz Chlebowski.
Al considerar a Juan Pablo II como un destacado peregrino de la paz, el párroco solicitó la reliquia de sangre de Juan Pablo II a Stanisław Jan Dziwisz, quien fue su secretario que lo acompañó en todos los viajes.
“Además de que estará aquí la reliquia, cada tercer miércoles del mes se organizará la Misa de Sanación y Liberación por las personas heridas de violencia, que vengan y se acerquen a la fuente de la misericordia del perdón y del amor que nos abraza”.
Asimismo, detalló que se hará una convocación de un grupo de Custodios de la Reliquia de San Juan Pablo II, integrado en la parroquia, así como la organización de eventos referentes a la persona, mensaje y servicio de Juan Pablo II.
Destacó que Morelos será la tercera entidad en México en tener una reliquia en primer grado de San Juan Pablo II, ya que también se ubican en parroquias de Puebla y Campeche.
Las reliquias serán colocadas junto a la imagen de la Virgen María, y el espacio será reforzado con tres vidrios templados, una barra de metal y un caudal y estará a la vista de todos, para que pueda apreciarse y pedir en oración por la paz en el estado.