Desde hace 23 años niños del catecismo en la colonia Lomas Tzompantle, viven la fe del viacrucis; este viernes nuevamente cumplieron con la encomienda, organizados por un grupo de ciudadanos que buscan por medio de los menores que los padres de acerquen a Dios.
Para hacer la representación los menores trabajan desde dos meses antes, cada uno aprende sus diálogos y hay un ensayo general. El lugar de donde comienzan es un barranco, caminan casi 300
metros.
En su inocencia se muestran emocionados, cohibidos pero felices de representar como dicen ellos la vida de Jesús. Elvira Alvear recordó que sus padres comenzaron con esta tradición en 1996 cuando ella contaba con apenas cinco años, ahora es la coordinadora de la procesión, "hoy junto con Jesus levantemos la Cruz, y una oración para pedir por aquellos que viven sin vivir, que se mantienen hunidos en la depresión, soledad, y en el sin sentido".
Los niños emprenden el paso, escuchan las indicaciones, se muestran orgullosos de sus atuendos, que les hicieron sus padres con su ayuda; allí van cada uno de los personajes, tratan de interpretarlos lo mejor que pueden, "Jesús" a sus 15 años es su segunda vez, y ya conoce el desenlace. "Jesús" cae en la tierra, le desgarran las ropas, las niñas y niños se creen en serio su papel y bajo la observación constante de Elviera Alvear; la procesión se detiene en cada estación, y la oración con la reflexión acompaña el momento. Llegado el momento cumbre, Jesús en la cruz, muere. Los niños actores y los adultos rezan, sin importar la edad de quién lo represente, el momento se vuelve emocionante.