Desde junio, los pobladores de Tlaltenango se reúnen en asamblea para afinar detalles para la realización de feria más grande de Cuernavaca en honor a la virgen de los Milagros. Para esta festividad, que inicia el 31 de agosto y hasta el 9 de septiembre, la avenida Emiliano Zapata quedará cerrada al tránsito vehicular.
El ayudante de este poblado, José Alfredo Rodríguez Sanciprian, señaló que desde el viernes empezaron los preparativos para establecer los pormenores de la 299 edición de la tradicional feria de Tlaltenango, para ello empezaron a marcar con pintura amarilla los mil 100 espacios que se ofertarán en la avenida Emiliano Zapata, para unos 680 expositores.
Cada puesto mide entre un metro y medio, y seis metros, su precio va de los 450 pesos, mil y tres mil pesos; el dinero recaudado se reparte entre los gastos de la feria, una limosna a la iglesia y un porcentaje al Ayuntamiento de Cuernavaca.
Nos han criticado de productos de otra naturaleza, pero creo que ya se quedó como un decir, porque el 90 por ciento son productos del país, es difícil identificar un producto chino, pero estamos procurando evitar esa venta de artículos, expuso.
El ayudante precisó que entre los acuerdos de asamblea está promover las artesanías y comida mexicana, así como evitar la venta de productos chinos, además, propusieron un nuevo reglamento para el próximo año en la edición 300, que consiste en prohibir el uso de unicel y plásticos como popotes y bolsas, por lo que en esta edición se colocará una mesa en la Ayudantía con venta de productos reciclables.
Este año se cumplen 44 años desde que se prohibió la venta de bebidas embriagantes porque se busca una convivencia familiar, lo cual ha permitido que cada año sea una de las más visitadas al reunir hasta 120 mil personas durante un fin de semana.