“Me dolieron hasta los dientes, me dolió todo”, responde con una carcajada Miguel Ángel Reyes, quien la mañana de ayer dejó sus actividades para acudir a aplicarse la segunda dosis contra el Covid-19 en el módulo instalado en el Campus Chamilpa de la UAEM.
Miguel recordó cómo le había ido con la primera aplicación pero confió en que esta vez será menor el “impacto” en su cuerpo.
Ya sin madrugar, platica que llegó a la avenida Universidad cerca de las 6:00 horas para formarse, la fila avanzó pronto y para antes de las 9:30 horas de la mañana ya estaba terminando su tiempo de espera.
En cuanto a los efectos de la primera dosis, cuando se aplicó al vacuna hace ya unos meses, cuenta que hubo dolor en todo el cuerpo pero aún con ello se fue a trabajar.
“Me fui a trabajar y se me quitó”, continúa mientras quien lo acompaña, Victoria Martínez, dice que también ella reportó un poco de cansancio pero evitó automedicarse y sólo optó por descansar en casa. Ambos hicieron un llamado a la población a vacunarse pues opinan que “si esta no te salva de que te vuelvas a contagiar, son menores los síntomas y ya no te tienen que entubar y no te tienes que morir”.
En el segundo día de la jornada de vacunación para personas de 40 a 49 años, para la segunda dosis de AstraZeneca, tampoco hubo gran afluencia por lo que en la tarde los módulos prácticamente estaban vacíos.
Las personas que hacen falta de recibir una primera dosis y que cumplan con la edad también están siendo vacunadas por las brigadas, así como las mujeres embarazas.
En el Campus Chamilpa de la UAEM, a diferencia del módulo vehicular del 3er Regimiento, si están permitiendo la vacunación a conductores.