Se les vio en la protesta del lunes, pero sus nombres siguen siendo un enigma. En la manifestación para exigir cese a las extorsiones, las mujeres indígenas de Hueyapan, que cargaban con cartulinas escritas en náhuatl, no tuvieron miedo a mostrar su rostro y fueron las primeras en atreverse a dar declaraciones, siempre que pudieran reservarse su nombre.
De acuerdo con una de ellas, la participación que tuvieron en la manifestación que cerró las vialidades del acceso norte a Cuautla representa parte de la lucha que han llevado a cabo, de manera histórica, para estar a la par de los hombres indígenas, quienes siguen ocupando los principales puestos de autoridad en sus comunidades.
“Muchas veces, por ser indígenas, no tenemos voz, no tenemos liderazgo. Desde las comunidades, el liderazgo lo tienen los hombres, porque el representante de comunales es hombre, el de la ayudantía es hombre y hay pocos espacios para las mujeres”, refirió la pobladora indígena.
Como parte del movimiento de defensa comunitaria iniciado en Hueyapan, la habitante pidió a las autoridades reconocer a la población su derecho a hacer uso de armas para combatir a la delincuencia.
“¿Por qué no? Que nos den esa legitimidad y que la respeten, eso es lo que estamos pidiendo en nuestras demandas”, refirió.