Aunque reconocen la derrama de una ayuda humanitaria que se volcó en Jojutla a favor de los afectados del sismo, el proceso de reconstrucción de sus viviendas está prácticamente parado, la colonia Benito Juárez requiere atención especial, reconocen los afectados.
Para Guillermo Celis Allende no es fácil empezar, en torno a las condiciones e inestabilidad del suelo, que colinda con el río Apatlaco, señaló que se organizaron para formar una asociación, después de que varias Fundaciones se reusaron entrar y participar en la reconstrucción de viviendas en la zona.
El también padre de Samara Celis y abuelo de la pequeña Sara Sofía Gil, cuyos cuerpos fueron rescatados ese trágico 19 de septiembre por un grupo de voluntarios y elementos del Ejército, cuando el soldado Moctezuma Hernández estalló en llanto al recibir sin vida a la menor. Momento que quedo registrado en una fotografía que recorrió el mundo, advirtió que a un año del sismo no hay reconstrucción de viviendas en la colonia Benito Juárez.
Su predio luce baldío como muchos, en algunos incluso hay casas de campaña, él y su esposa no pudieron quedarse, la pena les quitó las fuerzas y su casa fue de las ultimas en demolerse, pero ahora ha retomado fuerzas de esa amarga experiencia.
Indicó que son aproximadamente 40 familias que no han construido, muchos viven en casas de campaña, puesto que solo tres familias recibieron la ayuda de las fundaciones, mismas que no harán más que esas casas.
La mayoría tienen que hacer cimentaciones profundas y los 120 mil pesos del Fonden los gastan en demoler y sacar los viejos cimientos, reveló Guillermo Celis Allende, presidente de la Asociación “Barrios y colonias Unidas de Jojutla AC”.
“Vimos la necesidad de formar una asociación para gestionar la ayuda para la reconstrucción de sus viviendas” dijo, ya que la cimentación de cada vivienda será muy cara, y la mayoría quedó desempleado, por lo que no pueden costearla ante las difíciles condiciones del suelo.