Aunque la realidad nos diga que hemos hecho conquista en la vida real seguimos viviendo con miedo, señaló la escritora Alma Karla Sandoval Arizával en la conferencia “El liderazgo de las mujeres hoy, retos y conquistas”, en la cual reiteró que no hay un 8 de marzo que se pueda celebrar mientras siga la violencia feminicida.
Más de 300 mujeres se dieron cita en la Unidad Deportiva Ágora La Perseverancia de Jojutla para conmemorar este 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer con una conferencia a cargo de la reconocida escritora feminista Alma Karla Sandoval, quien interactuó con varias de las presentes para dar su testimonio de vida como mujeres. Sandoval Arizával pidió que escuchen a las que no están, que escuchen a sus ancestros y en honor a ellas conmemorar el 8 de marzo.
➡️ Noticias útiles en el canal de WhatsApp de El Sol de Cuernavaca ¡Entérate!
La conferencia, convocada por las autoridades municipales, tuvo una amena participación de mujeres orgullosas de su origen indígena, de mujeres que reconocen el liderazgo de otras mujeres; la escritora también habló del doloroso origen del 8 de marzo, que conmemora la lucha de cientos de mujeres que han perdido la vida por los derechos laborales, de equidad, de participación democrática del derecho al voto y de la defensa de la equidad de los derechos.
Alma Karla Sandoval recordó que en 1857 y a principio del siglo XX las mujeres que luchaban por mejores condiciones laborales en Nueva York murieron al ser encerradas en una fábrica que se incendió; las víctimas estaban protestando por las malas condiciones de trabajo, y murieron quemadas, por eso no se pueden lanzar las campanas al vuelo, ni se puede cantar victoria…”hemos logrado muchas conquistas, podemos asegurar que algunos derechos se nos han sido dados, pero hoy tenemos que entender que esos derechos han sido conseguidas por nuestras ancestras, que lucharon juntas, tuvieron que morir, estar encarceladas para que pudiéramos votar y ser candidatas, llegar a la universidad, para que podamos ser dueñas de la vida".
“No podemos celebrar en un país donde son asesinadas 11 (mujeres) diario, por la vida de las mujeres tenemos que poner en el centro a las mujeres, a sus cuerpos, a sus dueñas, a sus deseos y tenemos que recordar con mucha fuerza que seguimos sobreviviendo, resiliencia y por qué no el gusto de abrazarnos y de ser hermanas y ser soreras, no es un 10 de mayo y no me tienes que felicitar a mí, ni a ti, ni a ella, ni a las demás y como dice una amiga muy fuerte no me felicites por mis genitales celebra que sigo viva en un país como este”, expresó la escritora feminista.