En reunión con ONGS y al terminar de la misma, el alcalde electo, José Luis Urióstegui, afirmó que la tarifa del agua en la capital morelense es más barata que en otros lados y se podrán considerar estos ajustes siempre y cuando comience a garantizarse el servicio en los hogares, y para eso se requiere trabajar a fondo en busca de soluciones en la problemática que enfrenta el organismo operador de agua potable.
Lo que es lamentable, expuso, es que la falta de agua en las colonias sea un problema recurrente debido a que no se paga la energía eléctrica a pesar de que CFE, siendo una paraestatal, tiene la obligación de dar cumplimiento a su normativa y cobrar la energía que vende, y si SAPAC no se la está pagando de manera oportuna ni completa, las consecuencias es el corte, “no vamos a esperar hasta el 1 de enero para buscar soluciones, la estamos buscando y ayer tuve una reunión con la gerencia regional de la CFE para seguir conociendo la problemática y las posibilidades de solución”.
Hasta el mes pasado se debían 265 millones de pesos y para este mes la deuda es de 268 millones porque no se está pagando el consumo mensual, y en este momento, confió, hay 20 pozos con corte de luz y el Ayuntamiento ha promovido amparos en algunos, lo que permite que sigan funcionando, otros se pagaron y se reconectaron y otros se reconectaron con “diablitos” por parte del Ayuntamiento para que las bombas sigan funcionando.
Necesariamente, expuso, eso implica sanciones y que se siga pagando el consumo de energía eléctrica o generando la obligación de pago, y una vez más apeló al uso de energías renovables, lo que sin duda tardará varios años y si no ocurre el uso de estas energías como un proyecto viable, el problema del SAPAC no se va a resolver.
Luego de exponer ante los integrantes de las Organizaciones No Gubernamentales la posibilidad de llevar a cabo ajustes en varios rubros de los impuestos, Urióstegui Salgado planteó que si bien esa no es la única solución “o completa pero pasa por allí, en una revisión integral, he señalado que de acuerdo a estudios que se han hecho en diferentes ciudades el agua que estamos pagando (en Cuernavaca) es más económica que en otros lugares, y el ingreso que tiene SAPAC no es suficiente para un funcionamiento adecuado. No estoy afirmando que lo vayamos hacer, es una solución probable, pero tiene que ser medible en cuanto a que realmente nos funcione, porque hoy los recibidos de agua no se pagan porque el agua no llega y con justa razón”.
Lo más importante es hacer eficiente el servicio, y eliminar la corrupción que es lo que tanto ha dañado, generar controles desde el interior como con la participación ciudadana para que se transparenten los ingresos y los gastos del propio sistema, eficientar el desempeño de los trabajadores para que cada fuga que se detecte sea reparada de inmediato, y tener un stock de artículos que permitan la sustitución de tubos, válvulas y se evite que se extienda por semanas las soluciones, y con todo esto se explora la posibilidad de tener créditos a largo plazo y menor costo con el BID o Banobras, pero además se solicitará la colaboración de las autoridades estatales y federales ante un problema que no solo sea de Cuernavaca sino de Estado por las implicaciones sociales.
Sigue leyendo:
Suscríbete a nuestro canal de Youtube