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Los estados del Pacífico, desde Guerrero hasta Baja California Sur, suspendieron actividades y se mantienen en alerta por las tormentas tropicales Max y Lidia, cuyos efectos se sienten por toda la costa occidental mexicana.
Max tocó tierra ayer cerca del mediodía en el municipio de Petatlán, Guerrero, donde las fuertes lluvias provocaron el corte de la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, a la altura del municipio de Tecpan de Galeana, dejando a miles de personas incomunicadas.
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La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda, por medio de un mensaje en redes sociales, exhortó a la población a mantener las medidas de precaución debido a que las lluvias continuarán por todo el estado.
Autoridades implementaron el Plan DN-III de auxilio a la población para apoyar a posibles damnificados por las precipitaciones pluviales. En la región costa grande de Guerrero se habilitaron cuatro refugios temporales.
Los estados de Guerrero, Michoacán, Nayarit, Sinaloa y Baja California Sur suspendieron las clases en algunos de sus municipios y subsistemas educativos por las tormentas.
Los estados más al norte, como Jalisco, Colima, Nayarit, Sinaloa y BCS se preparan para la llegada de la tormenta tropical Lidia, que se prevé toque tierra hoy como huracán categoría 1.
En Mazatlán, Sinaloa, se habilitaron tres refugios temporales en la zona urbana para 800 personas y otros tres en la zona rural para 400 personas.
Ante el oleaje elevado y las lluvias, la Capitanía de Puerto de Mazatlán cerró la navegación a las embarcaciones menores y el acceso a las playas para los turistas.
Nayarit, Jalisco y Colima también están en alerta total por la llegada de Lidia. Mientras, Colima prevé olas de hasta seis metros de altura; Jalisco extendió su vigilancia a 31 de 125 municipios, y Nayarit colocó banderas rojas prohibiendo actividades recreativas y de navegación.
“Estamos en total alerta como DIF estatal y en los diferentes DIF municipales, para las acciones que se puedan llevar a cabo. También ya le informamos a DIF Nacional que Jalisco está listo para responder en caso de algo que se necesite”, señaló Luis Rodríguez Peña, director de Ayuda Humanitaria del DIF Jalisco.
Indicó que las bandas nubosas de este fenómeno, que se espera llegue hoy a Nayarit en categoría 1, afectará con lluvias y vientos a los municipios de la costa y Sierra Occidental de Jalisco.
“El ciclón tropical se estima que entre con categoría de huracán nivel 1. Es un huracán que debe de estar impactando el día martes, más o menos en la noche”.
Informó que ya se distribuyeron ocho mil artículos de atención humanitaria básica como cobijas, kits de aseo personal y alimentos, en 31 municipios de la costa y Sierra Occidental, que podrían verse afectados. Añadió que hay 800 inmuebles, en su mayoría escuelas, parroquias y casas ejidales, que podrían ser habilitadas como refugios temporales.
Por su parte, la Unidad Estatal de Protección Civil (UEPC) de Colima, que también siente los efectos de la tormenta tropical Max y cuyo centro se genera en Guerrero, no suspendió clases.
En Nayarit, el gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero instruyó a todos los funcionarios de su administración para que permanezcan atentos a la trayectoria y efectos que el fenómeno meteorológico cause en la entidad durante las próximas horas.
El secretario de finanzas del estado, Julio César López Ruelas, informó que el gobernador giró instrucciones para que se prepare una bolsa de recursos estimada en 30 millones de pesos para aplicarse en la emergencia.
Por su parte, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana informó que implementó acciones de prevención para salvaguardar la integridad de los nayaritas ante el paso de la tormenta tropical en los municipios de Acaponeta y San Blas.
También ayer se colocaron las banderas rojas correspondientes en las playas de Nayarit, que indican que las condiciones del mar no son favorables para realizar actividades acuáticas, derivado de las corrientes de retorno y alto oleaje producido por el fenómeno en cuestión.
En Baja California Sur las intensas lluvias provocadas por Lidia inundaron varios sectores de La Paz.
El titular de Protección Civil en La Paz, Erick Agúndez Cervantes, informó que 129 elementos, entre personal de Protección Civil, atención de emergencias, y 120 policías municipales, se movilizaron para atender las contingencias, entre ellas, el colapso de una techumbre en el centro cristiano La Viña, ubicado en la colonia Agua Escondida.
El subsecretario de Protección Civil Estatal, Hector Amparano, señaló que se requieren puentes y adecuar las rutas de evacuación ante contingencias.
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“La ciudad de La Paz, San Lucas y San José experimentan un crecimiento acelerado. Los asentamientos humanos se vuelven cada vez más complicados en distintas zonas, donde ya es necesario contar con puentes y rutas de evacuación. El crecimiento de las ciudades es complejo a nivel nacional, y es fundamental que las autoridades realicen un trabajo responsable en la planificación y factorización de zonas de riesgo”, afirmó Amparano.
Con información de Francisco Zorroza/ El Sol de Acapulco, Elier Lizárraga/ El Sol de Sinaloa, Román Ortega, Crys Benítez/ El Occidental y Rocío Casas/ El Sudcaliforniano
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