BRASILIA. Las muertes por Covid-19 aumentaron por sexta semana consecutiva en las Américas, con 202 por hora, a pesar de un descenso en las nuevas infecciones, informó la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Los contagios bajaron 31 por ciento respecto a la semana anterior, pero siguen siendo muy elevados (3.3 millones) y las muertes subieron 5.6 por ciento (más de 34 mil), afirmó la directora de la OPS, Carissa Etienne, en rueda de prensa virtual.
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La mitad de los fallecimientos fueron reportados en Estados Unidos, mientras países de la región vieron un aumento de los decesos tras un incremento de las hospitalizaciones e ingresos en terapias intensivas debido a la variante Ómicron.
La relajación de las medidas de salud pública es un factor que ha contribuido al mayor número de muertes, dijo Ettiene.
En América del Sur, Brasil registró el número más alto de muertes, un récord para esta nueva ola, y también aumentaron en Centroamérica y el Caribe.
“Sin duda, Ómicron nos sobrepasó”, dijo Etienne, y destacó que las herramientas desplegadas para combatir la pandemia no están funcionando para detener la nueva y más contagiosa variante.
El Covid-19 ha sido más letal en América que en cualquier otra región del mundo, agregó. Más de 2.5 millones de personas murieron en América durante el curso de la pandemia, con más de 100 mil fallecidos sólo en el primer mes de 2022.
“La inacción no es una opción cuando 34 mil personas han muerto por semana durante las últimas semanas en América”, afirmó. “Eso significa que hasta 202 personas han muerto cada hora”, agregó.
Catorce países y territorios de la región ya han inmunizado a más de 70 por ciento de la población elegible. Esta es la meta establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y para cumplirla en las Américas hay que asegurarse de que al menos 20 millones más de personas reciban todas sus dosis de vacunas.
COMPLOT EXTREMISTA
El Ministerio de Seguridad Pública de Canadá advirtió de los vínculos entre manifestantes opuestos a las medidas contra el Covid-19, que aún bloquean Ottawa, y un grupo de extrema derecha que fue acusado en la ciudad de Coutts, Alberta, por un presunto complot para matar a policías.
La policía incautó armas y municiones el lunes y cuatro de los hombres arrestados fueron acusados de conspirar para matar a varios oficiales de la Real Policía Montada de Canadá y civiles.
La policía advirtió a los manifestantes que si no se retiran enfrentarán arresto, multas y la incautación de sus camiones.
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