Al menos 10 empresas agremiadas a la Cámara Mexicana de la Industria Construcción (CMIC) en Morelos empezaron mal el año, pues fueron víctimas del robo de maquinaria hasta con un valor de un millón de pesos sin que hasta ahora hayan podido recuperar su patrimonio.
Los atracos se han registrado en diferentes puntos de la entidad, ya sea en bodegas o hasta en los lugares donde su personal ha trabajado. De poco ha servido que contraten veladores pues esa medida no detiene a los delincuentes que cometen los hurtos a mano armada. Desafortunadamente se llevan la maquinaria fuera del estado y "ahí es donde tenemos la problemática mayor; es por esa razón que ya no pueden volver a ubicarse (ya que algunas tienen rastreadores). Son máquinas que simplemente las mueven del estado”, dijo Ignacio Domínguez Antúnez, presidente de la CMIC Morelos.
Aseguró que como medida de reacción los empresarios tienen una vinculación con la Guardia Nacional de la dirección de caminos, a través de un chat de WhatsApp para que, en caso de algún robo, puedan alertar a las autoridades y entonces comiencen la búsqueda de inmediato.
“La mayoría de los robos han sido en la zona metropolitana del estado, en Cuernavaca, Temixco y Jiutepec. Desafortunadamente lo que es esta zona es donde se han cometido más estos robos. Con todo y veladores se han llevado la maquinaria. Los vigilantes no tienen el armamento necesario para evitar los atracos”, explicó el líder empresarial.
Tan solo el 25 de octubre del 2021, civiles armados irrumpieron en una construcción de la avenida Santa Úrsula, en la colonia del mismo nombre, en el municipio de Temixco, donde se encontraban trabajando 11 empleados. Los presuntos delincuentes obligaron a todos a subir a una camioneta Nissan Estaquitas y se los llevaron con dirección al norte.
Mientras tanto, otros de los supuestos ladrones abordaron una retroexcavadora y se la llevaron hacia el sur. Horas después, alrededor de las 11:00 horas, el ingeniero encargado de la obra llegó hasta el lugar de trabajo y no encontró ni a los empleados, ni la maquinaria. Entonces llamó a emergencias.
Casi dos horas después, los trabajadores fueron encontrados en un camino que llevaba hacia la carretera Cuernavaca-Ocuilan, donde sin teléfonos celulares y carteras los abandonaron. Mientras tanto, la retroexcavadora nunca fue encontrada.
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