Desde hace aproximadamente cinco años la nave principal del mercado más grande del Estado, el Adolfo López Mateos (ALM), no recibe una reparación Integral y solo se han hecho algunos arreglos de forma intermitente, así que un grupo de locatarios se coordinaron para crear “La brigada de comerciantes del ALM” con el fin de darle el mantenimiento necesario a este complejo comercial.
En marzo comenzaron a conjuntar esfuerzos y actualmente, con apoyo de las autoridades, inició un análisis de toda la estructura que corre a cargo del Colegio de Ingenieros para contar con un dictamen que les dirá por donde comenzar, aunque hasta el momento no hay fecha de entrega.
Personal de Protección Civil del municipio subió este viernes al domo para continuar con las inspecciones y se logró verificar que no toda la estructura se encuentra impermeabilizada y que incluso en algunas zonas el agua se encharca, lo que podría generar filtraciones y deterioro al largo plazo.
“Nos acompañaron Obras Públicas del municipio y Protección Civil quienes también supervisaron la parte de abajo, es decir las estructuras metálicas que hacen soporte. Posteriormente daremos una conferencia para ver cuál es el dictamen y cuáles van a ser los trabajos”, dijo el director del mercado, Héctor Suárez Díaz.
Sin embargo, algunos de los comerciantes que integran la Brigada aseguraron que la Dirección del ALM no se había involucrado en este tema a pesar de las inquietudes de los locatarios.
“Al director Héctor le gustan los reflectores y por eso está desinformando sobre el tema, porque este asunto lo llevamos trabajado desde hace varios meses con la autoridad para que ser hagan bien las cosas. Por muchos años solo se hicieron algunas reparaciones, pero lo que buscamos ahora es una rehabilitación integral que mucho le hace falta a nuestro mercado”, dijo uno de los vendedores, quien prefirió el anonimato.
Dentro de las acciones que se busca para el ALM esta también mejorar la red eléctrica ya que algunas instalaciones ya han provocado cortos circuitos que terminan en incendios. El más reciente fue el reportado la noche del pasado 26 de mayo que dejó a una comerciante de mochilas sin local y sin mercancía.
Ella fue la locataria, Luisa Martina Bella López, quien creció en el mercado viendo a su padres vender morrales; perdió 60 mil pesos en mercancía y se suma a los mercaderes que piden urgentemente una mejora del complejo que ya casi llega a la tercera edad, pues en mayo cumplió 57 años.
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