En lo que va del año se han reportado al menos cinco casos de secuestro virtual en Cuernavaca, donde las principales víctimas son menores de edad, reconoció la directora general de Prevención de la Violencia de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (Seprac), Samantha Popoca Reyes.
Ante esta situación, dijo que han trabajado de la mano con la Fiscalía de Investigación de Delitos de Alto Impacto (FIDAI) para atender este tipo de casos.
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A principios del 2024, un caso de un menor en la colonia Carolina se hizo mediático rápidamente por la desesperación de la madre de no saber de su hijo. Depositó dinero y posteriormente apareció con bien para más tarde darse a conocer que había sido una víctima de este delito.
Popoca Reyes, indicó que en redes sociales mediante diversos engaños como mensajes de supuestas paqueterías o en aquellos que te prometen ganar dinero con sólo ver vídeos son un fácil gancho para obtener información de los adolescentes, tal como es el número celular, para luego llamarles y realizar este tipo de fraude y extorsión.
El peligro que corren es que les vulneran la información, una vez que vulnerada les llaman para intentar extorsionarlos y eso es lo que realmente es preocupante y es algo que nos tiene ocupados, generar estas estrategias para la prevención de este delito.
Asimismo, hizo un llamado a las madres y padres de familia a estar atentos de lo que hacen sus hijos en redes sociales, además de que es importante evitar contestar llamadas de desconocidos, particularmente de números de ladas de otros países o estados.
¿Cuál es el modus operandi de los delincuentes?
De acuerdo con Popoca Reyes, el modus operandi de los delincuentes es el siguiente:
- Realizan llamadas a los teléfonos de los adolescentes, principalmente
- Los obligan, mediante engaños, a salir de su domiclio
- Algunos de los argumentos que utilizan es decirles que sus seres queridos están en peligro
- Una vez que salen de la casa, los mantienen en la línea telefónica
- Posteriormente, llaman a los papás para decirles que sus hijos están en riesgo y deben depositar alguna cantidad de dinero para dejarlos libre
- Los padres, al no poderse comunicar con sus hijos acceden a depositar el dinero
- Una vez que hacen el depósito, los delincuentes cuelgan
