En Morelos nadie quiere ser policía. La violencia que vive el estado, la falta de prestaciones y los bajos salarios propician que cada vez haya menos personas interesadas en unirse a las filas de seguridad pública.
En Cuernavaca hacen falta al menos 300 elementos, informó hace unos días el alcalde José Luis Urióstegui, mientras que el estado cuenta con un déficit de 10 mil policías, según lo dicho por el comisionado de seguridad estatal, José Antonio Ortiz Guarneros.
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La asociación civil Ciudadanos Uniformados ha dado cuenta que la inseguridad y la violencia que conlleva la profesión hace que cada vez menos jóvenes quieran ser policías, lo que genera un importante déficit de elementos de seguridad en la entidad.
"Las convocatorias ya no atraen a tantas personas como antes. A pesar de contar con prestaciones adecuadas, sigue siendo difícil generar nuevo interés”.
Asimismo, señala que al menos 9 de cada 10 policías viven con daño psicológico, afectando negativamente su desempeño laboral, pero también su vida personal.
Sin embargo, para el alcalde Urióstegui Salgado se trata más de un tema de falta de vocación. "No es el salario lo que atrae a los policías, es el deseo de servir a la sociedad, de aportar su esfuerzo cotidiano y mejorar las condiciones de seguridad".
Violencia termina con la vida de policías
En una semana al menos dos elementos policiacos han sido asesinados en Cuernavaca; uno de ellos, mientras realizaba sus labores, y el último, este lunes, luego de salir de servicio, mientras conducía su vehículo, sobre la carretera México-Cuernavaca.
En lo que va de la actual administración municipal, poco más de dos años, han sido asesinados cuatro elementos policiacos, dos de ellos en un enfrentamiento contra civiles armados el pasado 20 de noviembre, en la colonia Carolina.
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El caso más reciente fue el de Luis Ricardo Gómez, agente de policía adscrito a la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (Seprac), quien, de acuerdo con el alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui, había recibido amenazas, mismas por las que inició una carpeta de investigación y por las que contaba con medidas para portar su arma de fuego incluso fuera de su labor, pero estas vencieron el 30 de junio, por lo que al momento del ataque estaba desarmado y no pudo repeler la agresión.
Otro caso ocurrió apenas la semana pasada, el 15 de julio, cuando un elemento de la Policía Industrial, Bancaria y Auxiliar (PIBA) fue atacado a balazos mientras realizaba labores de vigilancia en un centro de recolección de desechos sólidos, en la colonia Lázaro Cárdenas, en la capital, del estado.
De acuerdo con información de las autoridades, Luis Ricardo salía de su turno en su auto particular cuando, a la altura de la Paloma de la Paz, sus victimarios comenzaron a dispararle iniciando una persecución que terminó sobre la carretera México-Cuernavaca, a la altura del hotel Girasoles.
Al lugar arribaron paramédicos que intentaron auxiliarlo, sin embargo, el agente ya había perdido la vida.
En lo que va del año, en el estado han sido asesinado cuatro elementos policiacos en los municipios de Cuernavaca, Zacatepec y Jiutepec, mientras que n lo que va del actual sexenio han perdido la vida en hechos violentos al menos 70 elementos.
Exigen dar con responsables de ataque a policía
“Hacemos un llamado respetuoso a la Fiscalía General del Estado para que realice una investigación exhaustiva y dé con los responsables, para que este homicidio no quede impune”, dijo Alicia Vázquez Luna, titular de la Seprac.
Recordó que Luis Ricardo había sido un elemento participativo en detenciones por diversos delitos y aseguramiento de vehículos con reporte de robo, particularmente en el polígono sur, donde laboraba.
“Era responsable del polígono sur, era un elemento que sí había reportado diversas detenciones de toda índole, vehículos robados, personas detenidas con narcóticos, algunas veces con armas, tenía trabajo operativo en el tiempo que estuvo en nuestra corporación”.
Con información de Emmanuel Ruiz / El Sol de Cuautla y Valeria Díaz / El Sol de Cuernavaca
