El número de casos de mujeres que reportaron haber sido víctimas de agresión en el país rebasó el millón, mientras que en Morelos ocurrieron 34 mil 486 de ellos en los últimos años. Las agresiones vinieron de hombres en 27 mil 457 de los casos, y 2 mil 226 por parte de mujeres.
De hecho, el 2.5 por ciento de los servicios otorgados por instituciones públicas en materia de violencia contra mujeres, reportadas en el Banco Nacional de Datos e Información sobre Casos de Violencia (Banavim), proviene del estado de Morelos. A nivel país el organismo reportó 870 mil 744 servicios otorgados; en la entidad se contabilizaron 20 mil 074.
En más de la mitad de los casos, la violencia psicológica es la que representan la mayor cifra de agresiones. Le siguen la física, económica, sexual en por lo menos 5 mil casos, y la patrimonial, entre otras. La modalidad es dentro del hogar en más de un 80 por ciento de las agresiones reportadas, seguida de la que ocurre dentro de la comunidad, institucional, laboral.
Cabe hacer mención que dicho banco de datos se nutre de lo reportado por instituciones como el Poder Judicial, los Servicios de Salud, los municipios, la Fiscalía General de Justicia, por mencionar algunos.
El Instituto de la Mujer para el Estado de Morelos (IMM) reportó del 1 de enero al 30 de noviembre de 2021 haber atendido a 2 mil 746 mujeres víctimas en los 11 Centros de Atención Externa (CAE), y los Centros de Justicia para Mujeres en Cuernavaca y Yautepec, cifra que significó un aumento de más del 100 por ciento comparado con un año antes, cuando se registraron mil 738 casos.
Febrero, marzo y mayo son los meses con más reportes: 116, 133 y 105, respectivamente; en noviembre disminuyó con 58 reportes, y en diciembre la cifra bajó, según el propio IMM.
Falta de políticas públicas
Patricia Bedolla Zamora, integrante del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), contabiliza al menos 90 feminicidios ocurridos en 2021, los cuales, aunque no sean reconocidos con estas características por la FGJEM, son las organizaciones civiles las que se han encargado de sustentarlos; además de una treintena más de los que se llegan a relacionar con el crimen organizado y son desestimados como feminicidio por las autoridades.
La falta de una política de prevención del delito en Morelos y de sanciones han logrado que se haya incentivado en los últimos años la incidencia de delitos como violencia familiar, sexual y desaparición forzada, que son tan solo el principio de la violencia feminicida: “De ninguna manera ha disminuido, son cifras que van ascendiendo, esto hablando de los asesinatos de mujeres. La muerte de mujeres siempre debe investigarse desde el principio con elementos de feminicidio, y no solo relacionarlos con el crimen organizado”.
Es el gobierno estatal quien debe tutelar los trabajos para la implementación de las acciones para atender la Alerta de Violencia de Género, emitida en 2015 para la entidad en 8 municipios dadas las elevadas cifras de violencia.
“No hay un informe claro de cómo se está atendiendo la Alerta de Violencia de Género, y con la denominación de Órgano Público Autónomo del Instituto de la Mujer éste ya no tiene responsabilidad de dar seguimiento”.
Ante el cambio de gobiernos municipales aún no se tienen claros los nombres de las titulares, ya que suelen ser parte de los nombramientos hechos al final, pues en su mayoría están bajo la dirección de Desarrollo Social.
El 25 de noviembre de 2021 el titular del Poder Ejecutivo anunció la creación de una Comisión Ejecutiva para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (COEVIM). Morelos es el único estado en el país que cuenta con un Instituto de las Mujeres para el Estado de Morelos (IMM), bajo el esquema de Organismo Público Autónomo desde agosto de 2018, cuando este cambio se dio en el Congreso local tras haberse descentralizado de la administración pública en 2002.
Para la abogada especialista en temas de género, el IMM se encuentra en una incertidumbre jurídica, pues ni se le dan las características de un verdadero organismo autónomo, pero tampoco se le da el apoyo suficiente para ser un órgano centralizado de la administración: “La única vía sería crear una Secretaría de la Mujer, no podemos regresar a lo que era. Actualmente no existe verdaderamente nada”.
La falta de una titular en el IMM representa el riesgo de que los recursos federales no lleguen a la entidad como ha ocurrido cada año: “La posibilidad de que se nos castigue en cuanto a los recursos federales existe, porque esa incertidumbre jurídica puede generar en la Federación una decisión de no enviar o enviar menos fondos; por otro lado, está la propuesta del Ejecutivo de crear una Comisión Ejecutiva para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (COEVIM), de la cual desconocemos quién será la titular”, considera Bedolla.