El gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo decidió deslindarse de la inseguridad pública de Cuernavaca y responsabilizar al presidente municipal, José Luis Urióstegui Salgado de la violencia suscitada en la capital morelense, esto al no signar el convenio del Mando Coordinado.
“Pues aquí está el presidente municipal... él es el encargado de Cuernavaca... él fue quien se salió del Mando Coordinado. Le hemos apoyado... pregúntale a él de lo que pasa aquí en Cuernavaca”, indicó el mandatario estatal.
Los recientes asesinatos suscitados en la colonia Lagunilla y en el centro de la ciudad, como el ocurrido la mañana de este 16 de diciembre, destacó el Gobernador que deben atribuirse a las decisiones tomadas por quien hoy está al frente del ayuntamiento.
Al ser cuestionado sobre si debiera reconsiderar su decisión el alcalde, Blanco Bravo dijo: “no, ya no hay vuelta atrás, ya lo ha dicho que no, aquí está el presidente municipal, yo si te pido le digas a él haber que pasa”.
El Gobernador aseguró, que le han apoyado de diversas maneras y mientras siga en su negativa, el edil debe responder a las demandas sociales sobre el tema de seguridad pública.
¿Desde cuándo Blanco Bravo se deslindó de la seguridad de Cuernavaca?
El deslinde del gobernador sobre la inseguridad pública en Cuernavaca se dio desde el mes de junio, cuando se volvió a ofrecer firmar el convenio del Mando Coordinado a Cuernavaca.
En sesión ordinaria de Cabildo, los integrantes del órgano colegiado municipal determinaron que a solicitud de la población, la capital morelense tendría que presentar un programa sobre prevención del delito alterno al del Poder Ejecutivo, porque carecía de resultados, siendo ineficaz.
Desde entonces el gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo mantiene su deslinde sobre los hechos violentos en la ciudad, para culpar de la violencia al gobierno municipal de manera reiterada.
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