COATZACOALCOS. Otra vez Veracruz. La noche del martes la entidad se estremeció nuevamente por un asesinato múltiple con el ataque al centro nocturno El Caballo Blanco, en Coatzacoalcos, con saldo hasta el momento de 28 fallecidos, a unos días de cumplirse cuatro meses de la masacre en Minatitlán en la que perdieron la vida 13 personas y pese al despliegue de por lo menos cuatro mil elementos de la Guardia Nacional a lo largo del estado.
Alrededor de las 22 horas, un comando arribó al establecimiento, en las inmediaciones de dos sucursales bancarias y a menos de 100 y 200 metros de la Cruz Roja e instalaciones policiacas. Ahí, alrededor de 10 personas sometieron a los guardias y rociaron gasolina; el humo al encender el combustible habría hecho el resto, pues aunque no se ha informado oficialmente cuántas personas murieron debido asfixia, declaraciones de familiares de las víctimas así lo revelan.
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No obstante, el establecimiento no presenta rastros evidentes de un incendio pese a que cuentan con gran cantidad de material flamable en su mobiliario.
Hasta ayer había 11 personas con pronóstico delicado de salud que continúan siendo atendidas en distintos hospitales.
UN MAL DÍA, UN MAL LUGAR
Ayer, cerca de 200 personas esperaban en los alrededores del Centro Integral de Justicia ubicado al poniente de la ciudad, todos con un familiar, amigo o conocido en el bar a la hora del ataque.
Alma Delia Ramos Jiménez se enteró del ataque al bar a través de redes sociales.
Acostumbrada a los hechos de violencia en Coatzacoalcos, se fue a dormir sin conocer más detalles. A las 8 de la mañana de ayer despertó con la llamada de su madre, quien le avisó que su hermano Ulises no había llegado a dormir: lo último que dijo es que iba a verse con una amiga a un bar, El Caballo Blanco.
La mujer asegura que a partir de ese momento se dedicó a buscar a su hermano en los hospitales, mientras su otro hermano buscó en la lista de fallecidos sin identificar. En esta última lo encontraron.
“Me duele mucho la muerte de mi hermano, pero para mi mamá ha sido devastador. Era un hombre de 53 años cariñoso y tranquilo que vivía y cuidaba a su madre, pero eligió un mal día y un mal lugar para ir a divertirse", lamenta.
En el reporte que la familia Ramos Jiménez recibió de su hermano dice que el fallecimiento se dio debido a intoxicación de gases. Su cuerpo no recibió un solo impacto de bala.
MAL REGIONAL
Coatzacoalcos y Minatitlán, ubicados a escasos 30 kilómetros de distancia, se insertan en la misma región veracruzana, donde hay violentas luchas entre grupos criminales que en los últimos años la han convertido escenario de asesinatos, secuestros y extorsiones.
De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Veracruz acumula en lo que va del año un promedio mensual de 187 homicidios dolosos, con junio como su pico más alto con 207.
Ayer, luego del atentado en el bar, Coatzacoalcos volvió a vivir temor cuando una persecución derivó en una balacera en la que resultaron dos presuntos maleantes detenidos.
La cifra de muertos siguió creciendo en el estado a lo largo del día. Una pareja fue sacada de un bar y asesinada a balazos en Cosoleacaque, mientras en Xalapa dos empleados de una tortillería fueron abatidos a tiros, en Zongolica una joven estudiante fue encontrada muerta en su habitación y en Xico un taxista fue baleado.
SE CULPAN MUTUAMENTE
Igual que en los hechos del 19 de abril en Minatitlán, la disputa entre el gobernador Cuitláhuac García y el fiscal estatal Jorge Winckler salió a relucir, pues se responsabilizan mutuamente de la inseguridad.
García Jiménez acusa a Winckler Ortiz de haber liberado al presunto autor intelectual de la masacre de este martes, Ricardo N, La Loca. , a lo que éste respondió que fue la Fiscalía General de la República (FGR) la responsable de liberarlo. La FGR anunció que atraerá el caso, mientras La Loca difundió un video en redes sociales en el que se deslinda de la masacre.
Además, ayer circuló otro video en el que el dueño de El Caballo Blanco, Agustín Ronzón, es decapitado luego de ser detenido por policías estatales el pasado sábado.
La corporación negó la versión. Dependencias de seguridad siguen sin emitir una versión oficial sobre los hechos, mientras el caso fue atraído por la FGR.